Es cosa única,
es espiritual,
es la concentración viva,
el flujo emocional.
El instante genuino de estar allí y en ese momento
(A menos del idiota que no se lo permite).
Es la puerta de entrada al misterio.
La llegada de la carrera de la ansiedad.
Es la muerte de la fantasía,
la gloria de la realidad,
la inocencia resucitada.
Nada se compara, no,
es cosa inmaculada.
Cosa pura...
-Deberíamos andar por la vida
probando besos vírgenes -
Eva querida! Chusmié muuuy poquito este, tu blog, pero esta encuadernación en particular... me encantó che!! TREMENDA.
ResponderEliminarAbrazo grande se queda corto che.
maxi? gracias querido!! este fue un trabajo por encargo, ahora descansa en san juan. perooo en la proxima libroson hay una versión femenina jajaj. nos vemos! besos!
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